quarta-feira, 22 de julho de 2015

En Irlanda se preguntan si es necesario seguir vacunando frente a la BVD


   Riona Sayers, especialista en salud animal, asegura que sí lo es aunque el AHI (Centro de Salud Animal de Irlanda) ha recogido datos que muestran que el porcentaje de animales positivos a BVD se ha reducido del 0,7 al 0,3 por ciento durante 2015.
   El ICBF (Federación Irlandesa de Criadores de Ganado Vacuno) ha recibido en lo que va de año cerca de dos millones de muestras para analizar la posible presencia del virus de la BVD. Desde el inicio de la fase voluntaria del programa de control en 2012, en el país se han analizado ya cerca de siete millones de muestras. Según el AHI (Centro de Salud Animal de Irlanda), el porcentaje de animales positivos a BVD se ha reducido del 0,7 % al 0,3 % durante este 2015.
   Con estas tasas tan bajas de BVD en los rebaños irlandeses, los ganaderos locales se preguntaron en la pasada edición de las jornadas del Teagasc Moorepark si era necesario continuar vacunando contra la BVD. Riona Sayers, especialista en salud animal, asegura que sí lo es*. “Tuvimos un brote de BVD entre 2008 y 2009 que a nuestra explotación le costó 30.000 euros. Ahora mismo hemos eliminado a casi todos los animales permanentemente infectados del país, y hemos reducido a la mitad el número de transmisores de BVD”, aseguró Sayers, quien aun así advierte que todavía “hay 2.000 animales positivos que siguen en las explotaciones irlandesas”.
   “La mayoría de los ganaderos está eliminando a los animales PI, haciendo que sus rebaños se conviertan en naif para la enfermedad. Esto también implica que las cabañas estén muy poco inmunizadas contra la enfermedad. Ante esta situación, si no se vacuna al rebaño y aparece un brote de BVD, o bien entra en contacto con un animal PI, las consecuencias económicas para la explotación son enormes”.
   Sayers comentó que hay que recomendar a los ganaderos que sigan vacunando hasta que el AHI no confirme que el número de animales PI en el país sea cero: “Somos conscientes de que en estos momentos, y hasta que no se eliminen a todos los animales PI, las posibilidades de que aparezca un brote de BVD aún sigue ahí”, terminó.
*El artículo completo se puede leer en el portal Agriland (www.agriland.ie/farming-news/bvd-do-farmers-still-need-to-vaccinate).
  Más información sobre la diarrea vírica bovina en www.bvdzero.es.

En Irlanda se preguntan si es necesario seguir vacunando frente a la BVD

http://albeitar.portalveterinaria.com/noticia/14174/Actualidad/boehringer-ingelheim-bvdzero.html

¿Qué haremos cuando los antibióticos dejen de funcionar?

Maryn McKenna, periodista especializada en salud pública, hace una inquietante reflexión acerca de lo que podrían ser la sanidad y los tratamientos de las infecciones en un mundo en el que las bacterias hubiesen conseguido hacerse resistentes a los antibióticos. No se trata de un mundo imaginario, es un mundo probable.

Maryn McKenna es una periodista especializada en salud pública. En este vídeo hace una reflexión acerca de los beneficios que nos han aportado hasta ahora los antibióticos, confrontándolos con lo que podría ocurrir en un mundo en el que dejasen de funcionar porque las bacterias se hubiesen hecho resistentes a todos ellos.
McKenna muestra que esta hipótesis no es improbable si no se cambian las pautas de tratamiento de las infecciones tanto en personas como en animales: las resistencias a cada antibiótico se han registrado rápidamente tras su puesta en uso a gran escala. Por ejemplo, la primera resistencia a la penicilina apareció en 1945, dos años después de que empezase a distribuirse; la vancomicina se comenzó a usar en 1972 y en 1988 había resistencias importantes; el imipenem desarrolló resistencias importantes a los 13 años de su comercialización; la daptomicina, que se lanzó en 2003, ya registraba resistencias en 2004.
La periodista hace hincapié asimismo en el grave problema de que se haya ralentizado la investigación para desarrollar nuevos antibióticos y que hay ya infecciones que sólo se pueden combatir con uno o dos de los más de 100 que hay en el mercado, o incluso no son sensibles a ninguno de ellos.
Las infecciones producidas por bacterias resistentes producen unas 50.000 muertes entre la población de Estados Unidos y Europa cada año y el proyecto británico Review on Antimicrobial Resistance estima que la cifra se eleva a 700.000 en todo el mundo.

http://albeitar.portalveterinaria.com/noticia/14169/Uso-responsable-de-antibioticos/boehringer-ingelheim.html

Investigadores estadounidenses crean pollos resistentes a enfermedades (Newcastle)

Se trata de animales resistentes genéticamente


El desarrollo de animales resistentes a las enfermedades puede ser una de las soluciones a largo plazo para combatir las enfermedades avícolas. Esta técnica tendría especial interés en países en los que la distribución y almacenamiento de vacunas presenta problemas, particularmente en áreas rurales en las que las aves de traspatio son una de las principales fuentes de ingresos del ganadero.

Según publica World Poultry, científicos de la Universidad de Georgia (Estados Unidos) han pasado los últimos cuatro años recogiendo datos que podrían hacer el hecho de crear anim ales resistentes una realidad.

El equipo ha utilizado una herramienta tecnológica llamada shRNA (cadenas simples de ARN que se pliegan sobre sí mismas) para frenar selectivamente la producción de ácidos nucleicos que causan enfermedad por parte de algunos virus, como es el caso del virus de la enfermedad de Newcastle. La enfermedad de Newcastle es uno los problemas más importantes a los que deben enfrentarse los avicultores de todo el mundo y está causada por uno de los virus aviares más mortales. Las cepas con menor virulencia son endémicas en los Estados Unidos y Canadá y se mantienen bajo control con el uso de vacunas, mientras que las cepas altamente virulentas son exóticas.

La técnica consiste en controlar regiones específicas de los ácidos nucleicos que son utilizadas por el virus y que son críticas para su supervivencia. De esta forma, se introduce resistencia genética a la enfermedad que es transmisible a la descendencia. Además, previniendo la replicación individual en los pollos del virus, se reduciría el nivel de transmisión del virus de un animal a otro.

Esta tecnología podría aplicarse también a otras enfermedades, como la gripe aviar o la gripe porcina; de hehco, según los científicos, se podrían obtener aves resistentes a la influenza aviar y a la enfermedad de Newcastle sin necesidad de vacunar. De esta forma, esta técnica tendría especial interés en países en los que la distribución y almacenamiento de vacunas presenta problemas, particularmente en áreas rurales en las que las aves de traspatio son una de las principales fuentes de ingresos del ganadero.

http://albeitar.portalveterinaria.com/noticia/14185/Actualidad/investigadores-estadounidenses-crean-pollos-resistentes-enfermedades.html